Te
dejo llorar hoy,
si
mañana sonríes.
Así
eres tú, y así me encantas.
Que
las lágrimas de la luna rezumen en tu cara.
Porque
vivir sin tus palabras es tortura de cada mañana.
Y
yo lo vivo,
el
no tenerte, ni amarte cada madrugada.
Yo
quiero ser feliz, tú dime por qué.
Yo
quiero abrazarte, tú dime dónde.
Yo
quiero amar, tú dime ya.
Por
favor, vuelve ya.
Queridos todos: Escribo el comentario en la última entrada, pero mis felicitaciones y mi cariño son para cada uno de vosotros. Me he unido durante un tiempo a vuestra particular expedición y quiero daros la enhorabuena por vuestros trabajos.¡Cuánto he disfrutado de este viaje! ¡Qué orgullosa y qué agradecida me siento de poder compartir ilusiones y emociones con vosotros y con Asun, la mejor guía posible: la luz.
ResponderEliminarOs animo a continuar y os deseo la más feliz de las travesías...
Nos ha gustado mucho que siguieras esta aventura con nosotros.Desde que te has ido ni el club de lectura ni este colegio ha sido lo mismo; profesores y alumnos te echamos de menos. Te queremos. Un beso.
EliminarGracias, Sonia, por unirte a nuestra expedición. Estamos encantados de que nos acompañes y compartas con nosotros nuestras ilusiones, emociones, sentimientos, palabras... Estamos encantados de que nos acompañes. Un beso.
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