martes, 1 de marzo de 2016

La ciudad de Pedro Salinas

Pedro Salinas Serrano nació en Madrid en 1891 y murió en Boston en 1951. Todos sus estudios los realizó en Madrid. Era conocido sobre todo por sus poesías y ensayos. Era uno de los integrantes de la Generación del 27. Fue exiliado para Estados Unidos después de la Guerra Civil.
En 1917 se fue para Sevilla junto con su mujer, donde recibió una cátedra en la Universidad de Sevilla. En 1932, mientras daba clase en la Escuela central de idiomas, creó la revista, Índice literario.
Se implicó en la creación de la Universidad Internacional de Verano de Santander. Después del golpe de estado, el que daría paso a la Guerra Civil, se exilió a Francia, donde fue profesor en el Wellesley College, más tarde se fue para la Universidad de Johns Hopkins y en 1943, para la Universidad de Puerto Rico, luego regresó para Baltimore en 1946.

OBRA POÉTICA
Su poesía, es una poesía marcada por la poesía pura de Juan Ramón Jiménez. La depuración y perfecciónes poéticas y el protagonismo de los temas amorosos perfilan su etapa de plenitud con poesías como Presagios, un conjunto de poesías que escribió en su estancia en Sevilla. Su etapa de plenitud está formada por la trilogía:
· La voz a ti debida, que presenta la historia de una pasión amorosa
· Razón de amor, que examina lo que queda del amor cuando éste  se acaba
· Largo lamento, que continúa la línea de las obras anteriores
En su exilio, escribió El contemplado, en el que se inspiró en el mar de Puerto Rico

POESÍA
De mirarte tanto y tanto,
de horizonte a la arena,
despacio,
del caracol al celaje,
brillo a brillo, pasmo a pasmo,
te he dado nombre; los ojos
te lo encontraron, mirándote.
Por las noches,
soñando que te miraba,
al abrigo de los párpados,
maduró, sin yo saberlo
este nombre tan redondo
que hoy me descendió a los labios.
Y lo dicen asombrados
de lo tarde que lo dicen.
¡Si era fatal el llamártelo!
¡Si antes de la voz, ya estaba
en el silencio tan claro!
¡Si tu has sido para mi,
desde el día
que mis ojos te estrenaron,
el contemplado, el constante
Contemplado!

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