viernes, 19 de febrero de 2016

Oh Dios
 ¿Por qué si soy tu humilde siervo?
Porque sin matar maté y sin querer me castigué a oír esos llantos quejumbrosos en la lejanía noche y día, que por ti mil vidas destruí cientos de almas corrompí. 
Por ti dios, solo por ti.
Oh Dios.
¿Por qué si soy tu humilde siervo?
Que de pesares cumplí por ti y por tu sentir Humildes lloros al morir.
Adiós te digo a ti por humillarme, abandonarme y por exacerbarme, a mí, a tu siervo más querido, al que dejaste herido en ese lecho cochambroso que creaste dios, al que llamas mundo y no llega a pueblo.
Oh Dios.
¿Por qué si soy tu humilde siervo?
Que por mi pesar y por mis ojos sangrantes. Sangrantes voces y pensamientos que alzar al aire sin respuesta, tal vez fui un juguete, un capricho de tus reproches, no eres mejor que yo dios caprichoso, avaricioso y codicioso, todo te lo debo a ti dios.
Oh Dios 
¿Porqué si soy tu humilde siervo? 
¿porqué al infierno mandas a mi y mi sentir?
Solo sin nadie mas que a mi.
A mi, a tu siervo, tu diablo de este mundo que de sentir esta traición hubiera alzado mis manos al cielo y hubiera rezado por mi en vez de por ti dios, acaso no lo entiendes, yo era tu demonio de esto a lo que llamas creación y sin ton ni son lo vacías de pureza y lo llenas de excrementos dios, lo que posees no es realeza, es devoción.
Oh dios 
¿Porqué si soy tu humilde siervo?
Que mis manos cubiertas de sangre, sudor y lágrimas se hubiesen desecho de las ánimas  destruidas por mi. Ánimas quejumbrosas en la noche que me atormentan a mi en vez de a ti, mil, dos mil, tres mil personas, animales, almas vivas maté y sacrifiqué por ti dios.
Oh dios
 ¿Porqué si soy tu humilde siervo?
 Me abandonas en la lujuria de mis pecados impío y libre de perdón que acudir a ti.
Oh dios
¿Porqué si soy tu humilde siervo?
No mandas mi sufrir y el de las almas destruidas por mi al cielo y olvidas tus pecados y tu perdón
Por mi, solo por mi.
Oh dios.
Sólo  yo era tu humilde siervo.
Sólo entre tus brazos yo te tenía te anclaba a este sentir impuro que tanto anhelabas solo por ti hice, mate, alcé y sacrifiqué, por ti y me lo pagas así  matándome sin temor y con orgullo mientras me desangro en mi sangre negra y mientras eso digo adios porque dios, solo te tenía a ti, solo a ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Las palabras y las opiniones nos ayudan a enriquecernos. Los viajeros de esta expedición queremos llegar a nuestro destino mucho más ricos.